La banca ética de los católicos
El próximo 8 de mayo se abrirá en Madrid una oficina bastante especial: la primera sucursal de FIRES (Financiación e Inversión Responsable, Ética y Solidaria), una federación de organizaciones no gubernamentales que han tomado como objetivo levantar una red de banca ética ligada al Proyecto FIARE. La oficina estará ubicada en el local de SETEM, una de las ONGD miembros de FIRES.
Este relativamente novedoso concepto de banca ética empezó a aplicarse hace algunos años en la banca comercial, a través de ciertos productos de inversión y depósito de los mas conocidos bancos españoles y no españoles. También hará un par de años que se estableció en el territorio español la primera red de banca ética no comercial.
Como prueba una vez más de la capacidad de pragmatismo que siempre ha presidido la acción solidaria de las organizaciones cristianas, FIRES (montada desde y por ONGDs de esa órbita) se ha lanzado a un campo ciertamente espinoso por la dificultad de control sobre los múltiples y complejos procesos implicados en las tareas de inversión de capitales. Lo hace, sin duda, esperando obtener réditos (perdón por el juego fácil de palabras) de su condición religiosa, porque, no hay que negarlo, una gran cantidad de personas cree mucho más fácilmente en la honradez básica de las y los cristianos llamados "de base" que en la de otros. Y cristianos son quienes andan metidos en esta fundación.
Sólo hay una cosa que me escama un poco: la estrecha vinculación entre la ONGD que aporta el local para esta primera oficina de FIRES, y la Federación Española de Religiosos de Enseñanza(FERE), rectores de varios centros de enseñanza en unión con CECA (Centros Católicos). En su página web hay un curioso banner y enlace con el Banco Popular, la banca de la Conferencia Episcopal española. Ciertamente, los vínculos entre distintos sectores cristianos, unos muy vinculados a la jerarquía católica y otros a todo lo contrario, es algo muy habitual, pero no me acaba de gustar mucho esta relación, lo reconozco.
Por lo demás, antes he dicho que mucha gente deposita más fácilmente su confianza en ciertos sectores cristianos. Yo, que he trabajado con esa gente durante mucho tiempo en la solidaridad, puedo atestiguar que entre ellos se puede encontrar lo mejor en lo tocante a rectitud y generosidad. Ojalá todo vaya bien y con éxito.
Este relativamente novedoso concepto de banca ética empezó a aplicarse hace algunos años en la banca comercial, a través de ciertos productos de inversión y depósito de los mas conocidos bancos españoles y no españoles. También hará un par de años que se estableció en el territorio español la primera red de banca ética no comercial.
Como prueba una vez más de la capacidad de pragmatismo que siempre ha presidido la acción solidaria de las organizaciones cristianas, FIRES (montada desde y por ONGDs de esa órbita) se ha lanzado a un campo ciertamente espinoso por la dificultad de control sobre los múltiples y complejos procesos implicados en las tareas de inversión de capitales. Lo hace, sin duda, esperando obtener réditos (perdón por el juego fácil de palabras) de su condición religiosa, porque, no hay que negarlo, una gran cantidad de personas cree mucho más fácilmente en la honradez básica de las y los cristianos llamados "de base" que en la de otros. Y cristianos son quienes andan metidos en esta fundación.
Sólo hay una cosa que me escama un poco: la estrecha vinculación entre la ONGD que aporta el local para esta primera oficina de FIRES, y la Federación Española de Religiosos de Enseñanza(FERE), rectores de varios centros de enseñanza en unión con CECA (Centros Católicos). En su página web hay un curioso banner y enlace con el Banco Popular, la banca de la Conferencia Episcopal española. Ciertamente, los vínculos entre distintos sectores cristianos, unos muy vinculados a la jerarquía católica y otros a todo lo contrario, es algo muy habitual, pero no me acaba de gustar mucho esta relación, lo reconozco.
Por lo demás, antes he dicho que mucha gente deposita más fácilmente su confianza en ciertos sectores cristianos. Yo, que he trabajado con esa gente durante mucho tiempo en la solidaridad, puedo atestiguar que entre ellos se puede encontrar lo mejor en lo tocante a rectitud y generosidad. Ojalá todo vaya bien y con éxito.
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